La casa de modas nos presenta su nueva colección llena de elegancia atemporal para esta temporada.

La ciudad de los Ángeles fue el lugar elegido por Donatella Versace para el desfile de su firma y no bajo la programación habitual de la Fashion Week. En esta pasarela se reunieron reconocidas modelos de la talla de Naomi Campbell, Irina Shayk, Kendall Jenner, Emily Ratajkowski y Gigi Hadid. Además, ha sido una presentación en la que pudimos ver a desde las jóvenes estrellas de Hollywood como Dua Lipa , Lil Nas X, Miley Cyrus , hasta las leyendas como Demi Moore, Elton John, Pamela Anderson y Cher .

Versace entregó una impresionante colección Otoño 2023 llena de sastrería muy elegante, básicos de vestuario y ropa de noche. Asimismo, se lucieron un montón de atuendos atractivos, bolsos, zapatos y joyas verdaderamente codiciables.

Esta presentación parece ser uno de los debuts más fuertes de esta temporada, debido a que se siente excepcionalmente deseable, sin cosas innecesarias, y siempre transmitiendo el espíritu de la marca . A pesar de que gran parte de la colección fue en tonalidades oscuras, eso no significó que la colección carezca de diversión y sensualidad.

Hay una notable referencia a los finales de los 80 y principios de los 90 en muchas siluetas, desde hombros marcados hasta faldas y vestidos con corpiño en forma de cono. Tres de las modelos se lucieron con voluminosos vestidos en forma de reloj de arena y guantes hasta los codos. Otro dato muy notable es el famoso catwalk con las manos en las caderas, recordando la era de las supermodelos en los 90 que hizo famoso al fundador de la casa, Gianni Versace.

Gigi Hadid llevó un atuendo muy icónico y atrevido, que posteriormente inspiró a Lady Gaga para llevarlo a los Oscars. Se trata de un vestido con transparencias que llegan hasta la cadera y que muestra la silueta femenina encorsetada. Por lo demás, destaca la variedad textil de las piezas, puesto que podemos encontrar desde el cuero, el satén o la tradicional lana, así como apuestas que podemos llevar habitualmente como los jeans anchos o los corsés. El naranja, el azul y el fucsia fueron los colores que rompieron con la monotonía oscura y con los que Donatella Versace convirtió el desfile en un espectáculo para recordar.