Existe una magia especial cuando hablamos de street style por el simple hecho de que, pasa de ser un escaparate visual a una prueba más real, de lo que algún mortal como nosotros podría usar.

Cuando existen las semanas de la moda y vemos grandes y renombradas pasarelas, a algunos nos pasa que nos cuestionamos el ¿por qué? algunas prendas son demasiado, que no entiendes el concepto, que te preguntas ¿Quién usaría eso? o de ¿qué? manera ¡tú! podrías usar algo así. No me refiero a que todo sea tan súper raro que nos mantenga con cara de signo de interrogación, si no que existen algunas presentaciones que si te vuelan la cabeza. Por supuesto que hay una razón para exagerar con los diseños, pero esto funciona para otro tema.

Entonces lo que nos da el estilo callejero o la moda de calle, es que son looks que dictan tendencia y mucho más digeribles, que te dan la apertura de buscar en el armario las prendas más cercanas al de tu influencer favorita por ejemplo, y copiar su look, o el de darte la oportunidad de pensar que si ellas pueden hacer esas combinaciones para su día a día, tú también te puedes atrever a hacer las tuyas, pero con un poco de inspiración previa, desde los estampados, las capas, los colores, los cortes, etc…

Además de darnos inspiración, puedo mencionar que las nuevas tendencias no solo las dictan las casas de moda en Paris, Londres o Nueva York, la moda a lo largo de los años ha sido un mezcla entre lo que hacen los diseñadores y lo que usa la gente, de ahí mucha importancia del street style.

En moda como en arquitectura, diseño de interiores, etc., existe una área en la que personas especialistas llamados coolhunters (cazadores de tendencias) se dedican a una minuciosa y ardua investigación y predicción de tendencias, que realizan en campo, es decir, salen a las calles, a los lugares más concurridos, a determinados eventos, para analizar, observar y entender que es lo que se está usando y traducirlo o trasladarlo a las masas.

Una de las semanas de la moda, en la que el street style se ha vuelto elemento importante, a nivel global, es la celebrada en Copenhague, Dinamarca. Debido a que los diseñadores y marcas que ahí se presentan son mucho más asequibles en comparación con las que se presentan en las grandes capitales.

El enfoque de esta fashion week va en dirección a un mercado más joven , por lo que su auge llegó como una bocanada de aire fresco, las mujeres nórdicas pueden ser mucho más atrevidas en comparación con las francesas o Italianas, una buena competencias para las Neoyorkinas. Podríamos estar hablando de que un más es más y esta perfectamente aprobado.

Algo que definitivo rescato del street style y es con lo que voy a terminar, es que más allá de usar algo que está de moda o algo que marcará una tendencia, se trata de usar y reflejar quién eres, hablar de ti a través de las prendas y accesorios que usas, de “no tener miedo a sentirte increíble”.